Además de las paredes, el techo también se puede llenar de color. Tal vez en muchas ocasiones has leído que los techos de color blanco son la opción predilecta y segura cuando se trata de elegir un tono, sin embargo, es posible variar un poco y elegir otra tonalidad, el espacio quedará igual de increíble.
Para la elección del color del techo, es esencial considerar cada detalle del espacio, así podrás estar seguro de que todo está en armonía. Sabemos que el color blanco es una opción segura y que puede ser un poco aterrador dar el paso de escoger otro tono. ¿Se verá bien? Nos repetimos esto una y otra vez cuando vamos a elegir el color. Lo cierto es que, si consideramos todas las características del espacio, no hay nada de qué preocuparse.
¿Qué debemos tener en cuenta al elegir el color del techo?
1. La altura
Dependiendo de la altura del lugar, existen una serie de colores que quedan mejor y favorecen el diseño. Las tonalidades oscuras y cálidas son recomendadas para techos altos y las claras para espacios pequeños, ya que ayudan a crear una amplitud visual.
En el caso de los tonos oscuros, hacen que la atención se dirija al techo cambiando la percepción del espacio, la habitación se verá más acogedora. En cambio, los colores pasteles y brillantes hacen que la mirada se desvíe hacia abajo, por este motivo son la mejor opción cuando el lugar es pequeño.
Existe una excepción con respecto al uso de colores oscuros en habitaciones con techos bajos, puede hacerse si las dimensiones del lugar son amplias.
2. Las paredes
La tonalidad de las paredes también es un aspecto que debe considerarse a la hora de elegir el color del techo. Si quieres que el techo se vea de cerca y destaque, entonces deberás fijarte en los tonos oscuros, pero cuidando que contrasten con las paredes. Otra opción es colocar el mismo color de las paredes, creando un efecto de pared infinita.
Si decides crear el efecto de pared infinita, es importante que tengas en cuenta que para esto se recomiendan colores claros, así no se satura la estética del espacio. ¿Es posible usar colores oscuros? Sí, sin embargo, procura colocar elementos que contrasten y que mantengan la luminosidad y amplitud del espacio.
3. Las sensaciones
En la elección del color también debes considerar las sensaciones que producen las tonalidades, al final esto influye en cómo te sentirás y se sentirán las personas en el espacio. Por ejemplo, los tonos cálidos dan alegría al lugar y los fríos crean un efecto relajante.
Las sensaciones también están relaciones con las características del espacio, por ejemplo, si se trata de la cocina tal vez la impresión que se quiera crear sea distinta a la del salón o la de una habitación.
¡Otra idea!
Otra opción es colocar el suelo y el techo del mismo color, esto genera un efecto de calidez y elegancia.
