¿Quieres renovar tu hogar? El papel pintado es una forma fácil y barata de transformar instantáneamente cualquier habitación. Tanto si quieres una pieza llamativa como algo sencillo para añadir un poco de textura, el papel pintado es la forma perfecta de convertir tu casa en un hogar.

Si nunca has empapelado antes, hay unos cuantos pasos que seguir antes de que tu habitación tenga un nuevo aspecto. Pero no te preocupes, con un poco de tiempo y paciencia, ¡Pronto tendrás tu habitación como nueva!

Paso 1: Preparar la pared

Antes de empezar a aplicar el papel pintado, asegúrate de que la pared está limpia y libre de suciedad y grasa. Si tu pared ya tiene papel pintado que hay que quitar, empieza a hacerlo antes de medir para poder limpiar cualquier desastre. Deja que el papel pintado se seque completamente antes de empezar el siguiente paso.

Una vez que la pared esté libre de suciedad y residuos, tendrás que medir la longitud y la anchura de la pared o paredes que vas a empapelar. Asegúrate de restar las puertas y ventanas de las medidas, ya que hay que recortarlas.

Método 1: Trabajar con pasta de papel pintado

La pasta de papel pintado es una gran opción para el papel pintado estándar. Antes de empezar, coloca el rollo de papel pintado en el suelo con el dibujo hacia abajo. Coge un paño húmedo y humedece ligeramente el reverso del papel hasta que la pasta se infiltre en el papel.

A continuación, tendrás que cortar la longitud según la medida de tu pared.

Muy importante: haz una marca horizontal en el papel para rodear cualquier tubería que haya detrás del radiador.

Una vez que el papel pintado esté húmedo y tenga la medida correcta, es hora de empezar a aplicarlo. Empieza por una esquina y asegúrate de que el papel quede recto y plano. Utiliza una esponja o un cepillo para presionar el papel contra la pared.

Método 2: Trabajar con papel pintado autoadhesivo

El papel pintado adhesivo o autoadhesivo es una gran elección, ya que elimina la necesidad de utilizar pasta de papel pintado. Empieza midiendo de nuevo la longitud y la anchura, luego corta el papel pintado según tus medidas asegurándote de dejar unos centímetros de más en los extremos para los ajustes.

Retira el soporte del papel pintado y te quedará una superficie pegajosa. Empieza a extender el papel pintado sobre la pared y asegúrate de que se coloca recto. Utiliza un paño suave para asegurarte de que el papel queda completamente pegado a la pared, presionando firmemente desde el centro hacia fuera.

Paso 2: Colocar alrededor de obstáculos

Es probable que tengas que cortar alrededor de obstáculos como marcos de ventanas, interruptores de la luz y enchufes. Para ello, utiliza unas tijeras afiladas o un cuchillo de manualidades. Una vez cortado, coge un paño húmedo y humedece ligeramente el borde del corte. Coge un poco de papel pintado sobrante y pégalo en los bordes cortados. Asegúrate de que los bordes queden a ras de la pared.

Continúa añadiendo las tiras sobrantes hasta que consigas el efecto deseado. También puedes utilizar un trozo de tela o una escobilla de goma para alisar las burbujas.

Paso 3: Toques finales

Una vez que hayas colocado todo el papel pintado, déjalo sin tocar durante unas horas para asegurarte de que esté seco y firme. Cuando esté completamente seco, utiliza un rollo de cinta adhesiva y oculta las juntas. Esto le dará un aspecto más pulido y evitará que se deshilache.

En definitiva

Empapelar tu casa puede ser una tarea laboriosa y sucia, pero puede transformarla por completo en muy poco tiempo. Con estos pasos y consejos, pronto tendrás tu habitación con una belleza impresionante.

Sólo recuerda planificar con antelación, tomarte tu tiempo y asegurarte de que la pared es adecuada para el papel antes de empezar. Cuando tengas todas las herramientas y suministros, estarás listo para empezar a empapelar.

Y si aun así, crees que es demasiado para ti o simplemente no quieres meterte en esa tarea, llámanos y nosotros lo haremos por ti. Somos especialistas en papel pintado.