Debido a lo delicada que puede ser la pintura, cuando se usa cierta cantidad y sobra, se genera la duda sobre qué hacer con el resto. La verdad es que hay formas de solucionar esto, pero hay que hacerlo con cuidado para no llegar a perjudicar el ambiente o incluso violar las leyes.
¿Es peligroso desechar la pintura?
La pintura con base disolvente no debe verterse en las tuberías o directamente en un espacio natural, porque es un residuo peligroso y contaminante. Es especialmente imprudente cuando se trata de pintura líquida, incluso es un delito.
Las fabricadas a base de aceite, aunque estén solidificadas siguen siendo peligrosas, a diferencia de la pintura de látex que solo es posible desecharla en los vertederos si está sólida, como sucede con otros tipos.
Sin embargo, mejor que desechar es preferible siempre reciclar la pintura, pero si por algún motivo esto no te resulta factible, es mejor consultar con las autoridades locales sobre cómo hacerlo. Por lo general los pasos a seguir son:
• Agregar aserrín a la lata que tiene algo de material.
• Dejar solidificar la preparación.
• Echar a la basura el envase sin tapar.
Entonces, ¿qué se puede hacer con la pintura?
Si has usado una parte de la pintura de la lata y no necesitas más, lo más recomendable es cerrar muy bien el envase y almacenar para reutilizar en un futuro; asegúrate de hacerlo en un espacio seco y fresco. Para este fin es ideal recurrir a los armarios de servicios o sótanos, ya que hay que evitar zonas donde llegue a haber altas o bajas temperaturas.
La humedad es otro elemento que puede ser perjudicial para el propio envase, ya que fomentaría la oxidación. Así que en definitiva se debe evitar espacios con esa característica, por ejemplo un cobertizo de jardín o garaje no suele cumplir con las pautas indicadas.
Ahora, si no tienes donde guardar de forma segura los envases de pintura o no crees usarlos aún en el futuro, tienes la opción de buscar organizaciones donde aceptan donaciones de pinturas, ya que optan por usarlas en sus proyectos o reciclarlas para luego, distribuirlas. Si no, simplemente opta por regalar esta pintura a algún amigo o conocido que la necesite.
Reciclaje de los botes de pintura
La pintura no es lo único en lo que se debe pensar cuando se va a reciclar, los envases suelen ser otro tema a tratar. Por lo general, los botes de pintura están fabricados con hojalata, un material que por suerte es totalmente reciclable.
Pero hay que tener algo en cuenta y es que a pesar de que ya hayas utilizado toda la pintura, lo normal es que queden algunos restos en el interior del bote. Por eso es recomendable llevar los envases a los puntos limpios para que reciban el tratamiento adecuado y no se entorpezca el proceso de reciclaje.
Algunas personas prefieren darles una segunda oportunidad a los botes de pintura. Se trata de limpiarlos y usarlos para otros fines en casa, como la creación de un jardín colgante.
Foto de Sven Brandsma
